El mercado de valores español ha vivido en los últimos 30 años un intenso y profundo proceso de cambio y crecimiento. Los sistemas técnicos, operativos y de organización en los que se apoya hoy el mercado han permitido canalizar importantes volúmenes de inversión y dotar a los mercados de una mayor transparencia, liquidez y eficacia.
La actual normativa española relativa a los mercados de valores e instrumentos financieros está hoy conformada fundamentalmente por normas de carácter europeo que se han traspuesto de forma paulatina a la legislación española. Desde la Directiva de Servicios de Inversión (DSI) de 1993 hasta la profunda reforma que ha entrado en vigor en 2018, y que supone la aplicación de MiFID II y el Reglamento MiFIR, la normativa se ha ido adaptando a la complejidad alcanzada por los mercados, servicios e instrumentos financieros.
A lo largo de tres décadas también se han producido grandes cambios en la estructura y el funcionamiento de los mercados de valores europeos. El nuevo entorno de negociación se caracteriza hoy por la apertura a una mayor competencia, entorno en el que los Mercados Regulados conviven con otras figuras de nueva creación, entre las que destacan los Sistemas Multilaterales de Negociación (SMN).
La Directiva de Mercados de Instrumentos Financieros (MiFID) reconoce el mercado regulado como el mercado de referencia y establece la necesidad de estrictos requisitos para autorizar tanto los mercados regulados como sus operadores e intermediarios.
Los mercados regulados españoles reciben la denominación de mercados secundarios oficiales. A tales efectos, se consideran los siguientes: las Bolsas de Valores, el Mercado de Renta Fija pública y privada (AIAF) y el Mercado de Futuros y Opciones (MEFF). Todos estos mercados son gestionados por BME.
El mercado regulado de Renta Variable español está gestionado por las Bolsas de Valores y opera sobre la plataforma electrónica de negociación SIBE, totalmente desarrollada por BME, que garantiza la interconexión de las cuatro Bolsas españolas, que funcionan como un mercado único.
El mercado se basa en un modelo dirigido por órdenes, un único libro electrónico y un sistema de case de operaciones que opera sobre la base de prioridad precio-tiempo. Además de acciones, se negocian warrants, certificados y fondos cotizados (ETFs). En algunos de sus segmentos el mercado cuenta con especialistas que proveen liquidez.
Desde enero de 2018 AIAF Mercado de Renta Fija, gestionado por BME, es el único mercado regulado en España que admite a negociación y cotiza deuda pública estatal, autonómica y local, así como deuda privada.
En el mercado de renta fija se admiten a cotización y se negocian toda una amplia gama de activos y productos adaptados a las necesidades de los emisores e inversores, con todas las posibilidades en cuanto a plazos y atendiendo a sus estrategias de captación de recursos, en caso de los emisores, y de gestión de su patrimonio, en caso de los inversores.
Los mercados de renta fija experimentan cambios de gran relevancia con la entrada en vigor de MiFID II, en cuanto se asemejan a los de acciones en transparencia, ejecución y protección. La nueva directiva establece obligaciones de transparencia previa y posterior a la ejecución de operaciones para las cotizaciones y volúmenes sobre valores de Renta Fija.
En el mercado regulado de Productos Derivados, MEFF, se negocian futuros y opciones cuyos subyacentes están referenciados a acciones individuales, al índice IBEX35® y a diferentes índices bursátiles europeos. Los inversores tienen en los derivados de MEFF herramientas para la gestión del riesgo y para la construcción y cobertura de carteras adaptables a cada perfil.
A partir de la crisis financiera de 2008, los mercados de derivados han estado sometidos a un gran escrutinio y la presión normativa ha sido creciente. Por este motivo, desde la entrada en vigor de MiFID II en 2018 los mercados de derivados están sujetos por primera vez a una normativa que permite mejorar el riesgo sistémico y la transparencia.
Los Sistemas Multilaterales de Negociación son aquellos sistemas que, operados por una empresa de servicios de inversión o por una sociedad rectora de un mercado secundario oficial, han de tener como objeto social exclusivo la gestión de un sistema que permita reunir, según sus normas no discrecionales, los diversos intereses de compra y de venta sobre instrumentos financieros de múltiples terceros.
Además de los mercados regulados, en el mercado español operan Sistemas Multilaterales de Negociación que negocian tanto acciones admitidas en mercados regulados (Bolsas) como valores de Deuda Pública y de Renta Fija Privada o Deuda Corporativa.
De esos Sistemas Multilaterales de Negociación destacan los siguientes:
BME Growth, un mercado orientado a empresas de reducida capitalización que buscan expandirse, con una regulación a medida, diseñada específicamente para ellas y unos costes y procesos adaptados a sus características. De esta manera, las empresas se benefician de las ventajas de un mercado: financiación, visibilidad, liquidez, valoraciones. Además de las empresas en expansión, en BME MTF Equity cotizan, en segmentos diferenciados, otro tipo de compañías como las SICAV (Sociedades de Inversión de Capital Variable), las SOCIMI (Sociedades de Inversión en el Mercado Inmobiliario), las ECR (Entidades de Capital Riesgo) y las SIL (Sociedades de Inversión Libre). Este mercado se creó en el año 2006 con el objetivo de dar entrada a empresas de una dimensión reducida cuyo acceso no hubiera sido posible a mercados de otra envergadura.
El MARF (Mercado Alternativo de Renta Fija), que se puso en marcha en 2013, es un mercado dirigido fundamentalmente a inversores institucionales, que pone a su disposición valores de renta fija de compañías de mediana dimensión, y habitualmente no cotizadas en el mercado de acciones. Se trata de una iniciativa que se establece con el objetivo fundamental de canalizar recursos financieros para empresas que pueden encontrar en este mercado requisitos más flexibles y una mayor agilidad en la tramitación de sus emisiones que en los mercados regulados, facilitando así los procesos de financiación.
Tanto BME Growth como el MARF son sistemas multilaterales de negociación gestionados por BME Sistemas de Negociación y por BME Renta Fija respectivamente. Ambas forman parte del Grupo BME.
También son sistemas multilaterales de negociación, sujetos a la normativa MiFID I y MiFID II, Latibex y SENAF.
Latibex, constituido en 1999, es el único mercado internacional sólo para valores latinoamericanos. Los valores cotizan en euros en el sistema electrónico de la Bolsa española (SIBE) y las empresas suministran al mercado la misma información que a las instituciones supervisoras de sus mercados de origen.
SENAF es otro sistema multilateral de negociación en el que se negocia deuda pública española, tanto al contado como en repos y operaciones simultáneas. Está dirigido a inversores institucionales.