Este procedimiento puede considerarse en el mercado español como la antesala de la próxima armonización de los mercados europeos al mercado americano que, desde mayo de este año, ya liquida sus operaciones de compraventa de valores de acuerdo con un ciclo de liquidación de D+1. Europa trabaja con el fin de implementar la reducción del ciclo de liquidación, previsiblemente, para finales de 2027. Esta novedad que BME ofrece no se enmarca dentro de ese proceso de transformación general de los mercados, pero sí puede considerarse un primer paso dados los ajustes técnicos que ha tenido que llevar a cabo.