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La Bolsa de Madrid fue creada en 1831, hace más de 190 años, lo que la convierte en una de las instituciones financieras más antiguas de España. A lo largo de su dilatada historia, la Bolsa de Madrid ha jugado un papel decisivo en la historia de España, sorteando largos ciclos industriales y económicos de auge con otros caracterizados por las crisis y las caídas, pero actuando siempre como un auténtico barómetro de la evolución económica de España. La Bolsa de Madrid ha jugado un rol crucial en el desarrollo de España y de su economía, ya que canaliza el ahorro hacia la inversión productiva y ayuda a la generación de riqueza. Como mercado secundario, la Bolsa ofrece a los inversores la oportunidad de convertir sus acciones en efectivo cuando lo deseen. La liquidez, como uno de los principales atributos de cualquier mercado, permite realizar cualquier operación con independencia de su carácter de corto, medio o largo plazo de la inversión y la Bolsa de Madrid sigue manteniendo una fuerte cuota de mercado para los valores españoles.
